https://www.youtube.com/watch?v=nCpMB8P5kXs
Phabullo Rodrigues da Silva (nacido el 1 de noviembre de 1994), conocido profesionalmente como Pabllo Vittar , es un cantante, compositor y drag queen brasileño. Su primera aparición en la televisión ocurrió en 2014, en un programa de televisión brasileño, interpretando "I Have Nothing" de Whitney Houston. Más tarde, en 2015, se hizo famoso en los medios de comunicación, debido al éxito de su vídeo musical "Open Bar", una versión en portugués de la canción de Major Lazer "Lean On" con letras originales. En menos de cuatro meses, el vídeo alcanzó un millón de visitas en Youtube. También lanzó un juego extendido con el mismo nombre, que usaba instrumentales de éxitos del pop con nuevos arreglos y letras.
El 12 de enero de 2017, lanzó su álbum debut de estudio "Vai Passar Mal". Vittar ha aparecido en canciones de artistas internacionales como "Sua Cara" de Major Lazer. El 27 de febrero de 2018 anunció a través de Twitter que su segundo álbum de estudio se lanzará en 2018. Con la nominación de "Sua Cara" en los Latin Grammy Awards 2018, Pabllo Vittar se convierte en el primer Drag Queen nominado al Grammy.
A finales de 2018 lanza "Highlight", tema principal de la serie de animación Super Drags, emitida por Netflix.
Pabllo Vittar es ampliamente considerado como una voz para la comunidad LGBTQ + de Brasil. Debido a que los peligros para las personas LGBTQ + han crecido en Brasil, la franqueza de Vittar acerca de ser raro lo ha convertido en un ícono para quienes viven en un ambiente hostil. Como una drag queen brasileña abiertamente gay, Vittar ha servido como una representación positiva de la homosexualidad y la fluidez de género. Ha trabajado con la cantante brasileña Anitta y con los artistas estadounidenses Fergie y Major Lazer, obteniendo apoyo para la visibilidad de las personas LGBTQ + en Brasil y otros países de América del Sur. Vittar también apareció en "Edge of Desire" una popular telenovela sobre un hombre transgénero. Después de ver a Vittar actuar en el festival Rock in Rio, el actor Fabio Assunção escribió en una publicación en Facebook: “Representas la posibilidad de la verdad en un mar de hipocresía. Tu figura pública es la voz de muchas personas sofocadas".
En una entrevista para la revista Veja, Phabullo reveló que eligió un nombre artístico masculino porque quería ser sincero con el público, ya que no es transgénero . Solo se siente como una mujer cuando está en el escenario como Pabllo Vittar, después de eso, se viste como un hombre. Durante la misma entrevista, Phabullo dijo que está "haciendo música para los humanos".
Super Drags
En esta serie animada para adultos, tres compañeros de trabajo gays llevan una doble vida. De noche defienden a la comunidad LGBTQ como fabulosas superheroínas drag queen.
Hay series que nacen en el momento inoportuno. O quizás el más oportuno. Cuando Netflix empezó a promocionar Super Drags, el terremoto de Jair Bolsonaro estaba en el horizonte pero estaba lejos de ser una realidad. Era como el caso de Donald Trump: un político tan repleto de odio y detestable que parecía imposible que los ciudadanos lo eligieran en las urnas. Pero sucedió. La ultraderecha más machista, racista y homófoba está instalada en el poder en Brasil. ¿Y quiénes están para combatirle? Pues tres drag queens con lentejuelas.
Es imposible no darle esta lectura a la gamberra serie de Netflix, más que nada porque no tenemos cada día series creadas en Brasil en boca del resto del mundo y porque su mensaje (que lo tiene) es idóneo para estos tiempos. En Brasil tienen un presidente que preferiría que su hijo muriera antes de que fuera homosexual y, en el lado correcto, los creadores Anderson Mahanski y Paulo Lescaut utilizan una serie de animación para predicar el amor libre y el derecho a vivir la sexualidad y el género como uno quiera. Supieron leer los tiempos.
Que conste que ésto no comporta que Super Drags sea arte y ensayo y que tenga un guión de James Ivory. Estamos hablando de una serie tremendamente absurda, inverosímil y directamente chorra sobre tres chicos que trabajan en un centro comercial y que salvan al mundo como superhéroes drags. Y no, no es una serie a la que mirar las aventuras con lupa porque lo único importante es el humor.
Son unas Supernenas pasadas por el filtro del MDMA y de MDNA , perfectas para ese multimillonario e internacional fandom de RuPaul’s Drag Race (el reality de drags de RuPaul) y con cinco chistes de penes por minuto. Esto es literal. Cuando no dicen “choto” están soltando eruptos fálicos, confunden líquidos corrosivos con esperma, mueven los testículos o luchan contra un monstruo tamaño Godzilla formado por hombres y mujeres practicando una super-orgía a la fuerza. Este es el nivel.
Tráiler en español
https://www.youtube.com/watch?v=KedqiCkEkk4
(o)
Sin embargo, el contexto histórico de Super Drags la convierte en una serie rebelde, denuncia, protesta contra un político que recuerda a uno de los villanos de la serie. Es inevitable ver a Sandoval, un predicador que odia la homosexualidad y que parece salido de Intereconomía o de una concentración filo-nazi y no pensar en Bolsonaro.
Y, claro, mientras que la serie tiene problemas de timing cómico y dista mucho de ser la chorrada perfecta, uno se encuentra pidiendo dos, tres y cuatro temporadas más a Netflix. Ellas combaten el mal con desfachatez y brilli-brilli sin pedir perdón por ser super-gays.
Las voces y las historias detrás de Super Drags
https://www.youtube.com/watch?v=JaqfHAt6HW
https://pt.wikipedia.org/wiki/Pabllo_Vittar
https://en.wikipedia.org/wiki/Pabllo_Vittar
https://www.netflix.com/es/title/80218634
https://pt.wikipedia.org/wiki/Super_Drags
