Netflix se está pasando con los seriotes que hace. En este caso nos ha traído
Stranger Things, estrenada con todos los capítulos hace 10 días. Ambientada en los años 80 (y de qué forma: entre el vestuario, la ambientación, y la BSO te transporta totalmente) la historia comienza con la desaparición en extrañas circunstancias del joven Will Byers en la apacible localidad de Hawkins, Indiana; donde nunca ocurre nada fuera de lo normal. Pronto comenzarán a suceder más eventos misteriosos: aparece una niña con apariencia de haberse escapado de un manicomio, se empieza a avistar un humanoide sin rostro por el pueblo, las luces fluctúan de forma singular... Mientras tanto, varios grupos de personajes (la familia de Will, el sheriff, los amigos del chico...) actúan por su cuenta con el único objetivo de encontrar a Will sano y salvo. Pero no será cosa fácil, porque los culpables de la situación no dejarán que se acerquen al origen del problema...
Stranger Things está conformada por 8 capítulos de 50 minutos cada uno, llenos de intriga, suspense y nostalgia; y protagonizados por actores de la talla de Winona Ryder. Yo de momento voy por el capítulo 6... y no sé cómo acabará, pero ya espero que tenga segunda temporada