Bueno, este fue el primer plato 'arriesgado' que intente cocinar, porque pensaba que hacer croquetas tenía historia pero son bastante asequibles. Los ingredientes, los pongo de forma orientativa, y en función de lo que os guste más o menos, podéis modificarlo al gusto. La bechamel que propongo es esencial, asi que podéis hacer ciertas modificaciones.
Ingredientes (Para 8 croquetas)
- 1 zanahoria (Esto si es importante, por cada 8 croquetas una zanahoria de tamaño normal)
- Un poco de cebolla (Al gusto, a mi es que me gusta echar bastante cebolla)
- Leche (Unos 200 ml)
- Harina (3 cucharadas)
- 1 huevo
- Pan rallado
- Aceite de Oliva y sal
Pelamos y rallamos la zanahoria y picamos la cebolla muy finamente. En una sarten con un poco de aceite, sofreimos la cebolla a fuego medio y hacemos lo mismo con la zanahoria, todo junto. Cuando la cebolla se empiece a dorar, escurrimos el aceite.
Entonces añadimos una cucharada de harina y la removemos en la sartén con la zanahoria y la cebolla durante un minuto. Añadimos la leche, una pizca de sal y removemos todo. Ahora le damos fuego fuerte y añadimos las otras dos cucharadas de harina. Entonces la mezcla empezará a espesarse, hasta que logremos el punto adecuado para la bechamel, esto es, que este compacta, pero cremosa. Pasamos la bechamel (Que tendrá un color amarillento-anaranjado) a un plato hondo y la cubrimos con plástico y la metemos en la nevera durante 1 hora, hasta que esté bien fría.
Antes de sacar la bechamel de la nevera, batimos un huevo en un plato, y en el otro ponemos el pan rallado. Y ahora viene lo más complicado. Sacáis la bechamel y vais haciendo las croquetas. Cogéis un poco de bechamel con una cuchara, lo mojáis en el huevo, lo pasáis al pan rallado para que esté bien 'empanada' y la pasáis a un plato. Cuando hayáis hecho 5 o 6, entonces le dáis la forma redondita, si lo hacéis justo después de sacarla del pan rallado se os puede romper.
Cuando estén listas, ya las fréis. A fuego medio con un poco de aceite. Y os las coméis solos o acompañados. Están muy buenas. Una zanahoria por persona, y para empanar, un huevo por persona. Lo demás podéis modificarlo un poco al gusto. Si lo hacéis asi, el sabor es un poco más dulzón, por la zanahoria, que una croqueta de jamón o de pollo.
Sé que normalmente las croquetas se compran congeladas o se hacen de jamón y demás, y estas de zanahoria creo que no es un sabor muy habitual, asi que intentadlo. Las croquetas son muy españolas y la zanahoria muy sana. Lo considero mi plato estrella .