Noche - Dormitorio de Clay
![Imagen](https://i.postimg.cc/nL8vr5Tm/Clay.png)
Rojo: Bueno, si hay alguien alérgico espero que sea la mente maestra esa, ¡que sufra!
Rojo se calla un segundo y mira a Clay melancólicamente tras haberle hecho esa pregunta tan inocente como íntima.Rojo: Pues, verás... Sí, a ver. Algo hay. O hubo. Sí, más bien hubo...
Había una chica que vivía en un pueblo muy cercano al mío, se llamaba Maya. Era una chica muy agradable y muy animalista como yo. Ella también tenía una mascota inusual, una tortuga para ser preciso.
Aunque parezca una tontería, su tortuga nos enseñó mucho. Nos enseñó, en primer lugar, a prepararnos para el duro invierno en la montaña y en general a saber cuándo es el momento de refugiarse ante las adversidades para salir con más fuerza que nunca.
También nos enseñó la importancia de la lentitud en un mundo tan acelerado como el que vivimos. De hecho, Maya decidió llamar a su tortuga Casiopea, como la tortuga de Momo. No sé si la conoces, Momo es un personaje de un libro de hace ya unos cuantos años, pero que trata temas muy actuales como este.
De vez en cuando, a Maya le gustaba "sacar a pasear" a su tortuga y, aunque al principio es verdad que me ponía nervioso y me cansaba ir a su ritmo, luego me fui acostumbrando. Fue ahí cuando empecé a observar con detenimiento la naturaleza, todo lo que nos rodea. A ritmo de tortuga, notas cosas que de otra forma no percibes: el ruido de las hojas al pisarlas, las interacciones entre pequeños animales, la evolución del paisaje a través de las estaciones...
Rojo se detiene, se nota que quiere seguir hablando de Maya, pero no quiere aburrir a Clay.Rojo: En fin, me estoy yendo un poco por las ramas. ¿Te estoy aburriendo?
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